domingo, 1 de febrero de 2009

El Tono de Tu Voz


El Tono de tu Voz
Entre las cosas tuyas que nunca me fueron gratas, estaba ese tono de voz….un chirrido hiriente y oxidado que con los años, te termina agriando.
A la primera resultaba más dulce, más cauto y sobre todo más embaucador.
Me convenciste para que te amara, para acortar las noches….primero imaginándote….luego entregándolas a la caricia.
A lo segundo nos surgió una ñoña diferencia que tensó los vocablos hasta hacerlos gruesos.
Imperceptibles y lentos, sin que yo quisiera o hiciera, fuiste imponiendo las razones malheridas de quienes saben chillar más fuerte.
Acabé levantándome a tu hora, acostándome cuando lo decías, comiendo lo que entraba en tu gana y vistiendo al amparo del temor a que a ti no te gustara.
Terminé por dejar de ser yo, no por amor, sino al paso de oca impuesto por tus gritos.
Un día, descubrí la costumbre de vivir sin ser yo.
Y por no venir, no me vino ni la pena.
Hasta que me hablaste del otro.
Contabas que lo sentías menos dócil en la cama, más salvaje en la doma, siempre dispuesto a pisar el antes y coger a la vida por sus putos cuernos.
Me echaste en cara que yo ya no era el yo del que te enamoraste y que lo mejor era que cada uno buscara su propia sábana y aquí no paso nada.
Llevo una hora frente al espejo y me cuesta reconocerme.
Hace dos meses que no se de ti y dos más que en un café, confesaste la felicidad de sentirte ahora dominada.
Y me jode.
No que te abras delante de otro ni que otro te abra.
No que olvides que entre esos sesenta días sin llamadas hubo uno que resultó ser mi cumpleaños.
Lo que más me jode e irrita es reconocer que pueda llegar a echarte de menos.

Bucardo


Registro Propiedad Intelectu@l

No hay comentarios: